Entrevista a Abdiel Batista, autor de El burdel de algún dios.
¿Cuándo empezaste a escribir?
En realidad, me animé a escribir cuando tenía unos veinte años. Decidí incurrir en el acto de escritura porque de niño fui admirador de cuentos que me narraba mi abuelo, y de joven; ya más independiente me convertí en devorador de novelas y revistas. Era un lector promedio y un día entre los diecinueve o veinte años me creí capaz de escribir. Una aventura intermitente de años que finalizó, con la escritura de este primer libro.
¿Quién o qué te inspiró a hacerlo?
La inspiración es un mecanismo de ayuda que necesita cada individuo para avanzar. He aprendido a utilizar el “Yo” para construir proyectos de vida, donde he logrado cada día ser mejor. En mi caso, escribir es un acto donde busco ser mejor, tanto en lo profesional, como en mi vida privada. He encontrado en esa primera persona; el mejor motor inspirador para conquistar metas.
¿Por qué esta obra?
La obra nace como una recolección de cuentos entre el 2015 y 2017. Escritos en el peor momento de mi vida. Cuando debía superar depresiones y malos hábitos de conductas. Dentro de aquellas terapias, se me ofreció una actividad extracurricular, para manejar mejor mis pensamientos. No había otra cosa más que escribir. Por eso a veces me llamo: “escritor de recurso” en busca de un significado a mi historia. La escritura me formó como mejor persona. Creo que le debo la vida.
¿Qué te propones con ella?
Enseñar que se puede superar todo ante las adversidades. Que, para muchos, los talentos que aprendemos a través de la vida están para ayudarnos. Si pensamos en que solo los genios pueden ser grandes, estamos sacrificando nuestra propia esencia. Nadie nos condena a dejar de pensar, solo nuestra ignorancia nos oscurece de por vida. Con este libro inicio mi carrera como escritor de oficio. Con brújula y estructura.
¿Qué se va a encontrar el lector en esta obra?
Relatos con toques distópicos, porque en algunos relatos incluí leyes, guerras y un lugar en el futuro. También, fantasía. Donde sus personajes se ven atrapados por situaciones no cotidianas que cambian su destino, les crea conflictos, para tomar; decisiones crudas que los llevan a finales… Bueno esa parte no puedo contarla.
¿Qué recomendarías al lector antes de comenzar a navegar por las páginas de esta obra?
Cada personaje fue creado de forma simple. Puede ser como cualquiera de nosotros, en situaciones propias o ajenas en su mundo rutinario. Solo que a cada uno le coloqué ciertos obstáculos fantásticos, donde; su vida deja de ser normal y se debe tomar decisiones para avanzar o perderse en el olvido. Le diría a cada lector que asuma cada historia como propia y que se vea en el espejo de vida de aquellos personajes. Se llevará su propio aprendizaje que no caerá en lo moral, sino en su juicio sano.
¿Qué nos puede aportar la lectura de El burdel de algún dios?
El burdel de algún dios es todo mientras se viva buscando respuestas de las necesidades que nos da la vida. En el libro, podrás encontrar traición, fe, el amor, esperanza, ayuda, enseñanzas, destinos paralelos, derrotas y triunfos. Un libro con narrativa sencilla, para lectores que desean ficción en las delicias de vivir.
¿Qué escritor o escritores te han inspirado más como lectora y por qué?
Primero Julio Cortázar. La esencia y lo lúdico de escribir, el realismo mágico de Gabriel García Márquez. El último escritor del sufrimiento Fiodor Dostoievski. Las plumas americanas de William Faulkner, Truman Capote y Ernest Hemingway han sido todo ellos los pilares para entender el oficio.
Podríamos decir que, en cierto modo, el proceso de escritura del libro ha sido una terapia para ti ayudándote a superar duros momentos de tu vida. ¿Qué nos puedes contar al respecto?
Yo llegué a la escritura como mencioné antes de una manera a la que llamo: “Escritor por recurso”
Empecé a escribir de forma seguida en un momento de mi vida donde debí asistir a terapias de conductas. Una de las terapeutas, morena, alta con ojos brillantes nos convenció que debíamos adicionar a nuestras vidas un nuevo hobby. Yo escogí la escritura, porque era lector y escribía en forma intermitente. Hasta hoy, no me arrepiento de ello.
En un principio la obra la escribiste como relatos independientes. ¿En qué momento decidiste elegir algunos de ellos para compendiarlos en un libro?
Siempre he leído más cuentos que novelas. A veces, me gusta investigar mucho a diferentes escritores. Su vida, sus obras, su biografía completa. Sentado una vez en un sillón mientras buscaba algunas cosas para escribir me encontré con esto: “No empieces escribiendo novelas, llevan demasiado tiempo. Comienza tu escritura con relatos cortos, al menos uno a la semana. Dedica un año a hacerlo. Es imposible escribir 52 malas historias seguidas” Fueron palabras de Ray Bradbury que he mantenido en mi cabeza. Por eso, escribí en el anonimato, muchos cuentos cortos en hojas sueltas. Después, salté a relatos más largos. Así nacieron los escogidos para el burdel de algún dios. Merecían la pena ver la luz en este lado del universo.
¿Qué método utilizas a la hora de escribir?
Antes de la confección de este primer libro, escribía en forma muy desordenada y sin objetivos. Un cuento a la semana, al mes o cuando quería sentarme frente al computador. Cuando empecé el burdel de algún dios me organicé en una sola estructura. El tiempo de inicio y final de la obra, mínimo seis meses para tener un manuscrito con una revisión. Escribo mínimo mil palabras por sesión de escritura. A la semana, debo tener como mínimo seis mil palabras escritas, contando el artículo o historia semanal.
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